A mis lectores:
Ni por un momento he pensado hacer un libro científico. No me creo capacitada para ello.
La HISTORIA DE LA GASTRONOMÍA, pese a su pomposo título, es tan sólo un ligero esbozo de ella, en el que roza ligeramente algunos temas que he creído fueran interesantes.
Ya sé que muchas de las anécdotas que incluyo son harto conocidas, y otros dirán que las he «copiado». Si las hubiera inventado, no serían anécdotas… Vuelvo a insistir, mi obra es tan sólo un esbozo, un ligerísimo esbozo; por tanto, no les sorprenda a mis lectores que algunas materias no las haya tratado a fondo, como acontece con el vino, pues hubiera necesitado, de estudiarlo tal como merece, el volumen entero, y aún… Aparte de que no tengo capacidad y sabiduría para más, yo tan sólo he pretendido entretener; ¿lo he logrado?
Mis lectores tienen la palabra.
La Autora